Curso
Crónicas de naufragios inevitables
Arte y cultura en el “pantano” neoliberal
En uno de sus “gestos artísticos desmesurados”, Damien Hirst inventa un naufragio y “rescata” esculturas gigantescas en las que el ultra-kitsch y la pseudo-provocación se entrelazan de forma delirante. Koons coloca una figura “hinchable” en Nueva York que parece rendir homenaje a la cursilada “a lo Lladró”, un alcalde, convertido en un friki de tomo y lomo, inaugura una rotonda en Vigo que es un “pastelón” indigesto. No faltan los teóricos que reivindican la “pretenciosidad” en un momento en el que tendríamos que estar encantados de la vida porque, literalmente, no podemos ir a peor.
Necesitamos pensar el arte y la cultura contemporánea más allá del “buenrollismo” y sin deslizarnos hacia el pesimismo (administrado habitualmente con un tono plúmbeo académico), intentando ofrecer una cartografía (obviamente parcial) de lo que está pasando. Cuando hemos asistido a la apoteosis y a la decadencia del “curatorismo”, tras una Bienal de Venecia (2017) en la que se ofrecía un panorama patético del arte como algo que más que “vivo” está zombificado, necesitamos generar posicionamientos críticos que planten cara al “postureo” esteticista.
Necesitamos pensar el arte y la cultura contemporánea más allá del “buenrollismo” y sin deslizarnos hacia el pesimismo (administrado habitualmente con un tono plúmbeo académico), intentando ofrecer una cartografía (obviamente parcial) de lo que está pasando. Cuando hemos asistido a la apoteosis y a la decadencia del “curatorismo”, tras una Bienal de Venecia (2017) en la que se ofrecía un panorama patético del arte como algo que más que “vivo” está zombificado, necesitamos generar posicionamientos críticos que planten cara al “postureo” esteticista.
Aquellas «migraciones de Cagliostro» de las que hablara Umberto Eco, manifiestas en el gusto por la imprecisión histórica, la credulidad indiscriminada hacia cualquier fuente y la tendencia a no usar un testimonio cuando se haya demostrado fidedigno, sino a juzgarlo fidedigno porque ha sido usado, han terminado por conducir a la burda precipitación –inducida por lo que llamaría «política a golpe de “like”»– de la «era de la posverdad», cuando eso que los tertulianos llaman «el relato» no es otra cosa que la más cínica de las poses.
No me dejaré llevar por el rapto psicoanalítico, aunque tengo que parodiar la consideración lacaniana de que todo objeto no es otra cosa que un «objeto perdido». En la época de la compresión, con la urgencia twittera, las ocurrencias «meme» y los regalos en «loop» del «gif», cuando nos seducen más los «glicht» que la alta definición, conscientes de que, como apunta Hito Steyerl, el «“spam” será nuestro legado», nos entretenemos con una combinación de frikismo y plagiarismo. La estética de «lo obvio y lo obtuso», tras los años apropiacionistas en los que los artistas se administraban la retórica del simulacro a lo Baudrillard, nos deparó unas dosis demoledoras de realismo traumático cuando no de un arte del «shock» que, a la postre, terminó usando indiscriminadamente moscas o diamantes.
Como declara sin tapujos Kenneth Goldmisth, estamos perdiendo tiempo en Internet, participando en la viralización de cualquier cosa, entregados a la rumorología, haciendo que lo aurático dé vueltas sin tino en el microondas. El objeto anestético y radicalmente epidémico del siglo, aquel urinario pedestalizado, resulta que puede ser una copia de una ocurrencia de Else von Freytag-Loringhonen, la excéntrica Baronesa Dadá. Por fin tendríamos el «Génesis» artístico verdadero: «En el principio fue el “fake”».
PROGRAMA:
-Los orígenes de la post-verdad. [En memoria de Elmyr de Hory maestro del “plagiarismo”].
-Hipermodernidad y hipsterismo. [A partir de las parodias de la indignación en Occupy Wall Street].
-Tiempo y objetualidad en el arte contemporáneo. [Cuando el tiempo está desquiciado y Shakespeare es un fantasma que no deja de retornar].
-La cultura en el “molino satánico” del neoliberalismo. [Aproximaciones post-foucaultianas a la estética biopolítica].
-Relaciones (nada) peligrosas. [Reconsiderando la estética relacional, la postproducción y el fenómeno radicante].
-Una lección de Perogrullo. [Paradojas del mercado artístico, antinomias del comportamiento creativo, paralogismos de la crítica].
-“No controlan nada, ni siquiera se controlan ellos mismos”. [Para re-citar a un ministro iraquí que tenía claro que nada estaba claro].
-Reservado el derecho de admisión. [Gran Hotel Abismo, un lugar para contemplar naufragios tras el “Grand Tour”].
BIBLIOGRAFÍA.
-Fernando Castro Flórez: Mierda y catástrofe. Síndromes culturales del arte contemporáneo, Ed. Fórcola, Madrid, 2014.
-Jonathan Crary: 24/7. El capitalismo al asalto del sueño, Ed. Ariel, Barcelona, 2015.
-Dan Fox: Pretenciosidad. Por qué es importante, Ed. Alpha Decay, Barcelona, 2017.
-Boris Groys: Volverse público. Las transformaciones del arte en el ágora contemporánea, Ed. La Caja Negra, Buenos Aires, 2014.
-Nathalie Heinich: El paradigma del arte contemporáneo. Estructuras de una revolución artística, Ed. Casimiro, Madrid, 2017.
-W.J.T. Mitchell: ¿Qué quieren las imágenes?, Ed. Sans Soleil, Vitoria, 2017.
-Mario Perniola: El arte expandido, Ed. Casimiro, Madrid, 2016.
-Hito Steyerl: Los condenados de la pantalla, Ed. Caja Negra, Buenos Aires, 2014.
Fernando Castro Flórez. (Plasencia, 1964). Profesor Titular de Estética y Teoría de las Artes de la Universidad Autónoma de Madrid. Crítico de arte de ABC Cultural. Ha sido miembro del Patronato del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y en la actualidad forma parte de su Comité Asesor. Escribe regularmente en “Descubrir el arte”, “Capital Arte” o “Revista de Occidente”. Ha comisariado numerosas exposiciones de artistas como Tony Cragg, David Nash, Nacho Criado, Fernando Sinaga, Andy Warhol, Francis Bacon, Antón Patiño, Julian Opie, Imi Knoebel o Bernardí Roig. Comisario de proyectos como la Trienal de Chile, la Bienal de Curitiba, la Bienal de Cuenca (Ecuador) o el Pabellón de Chile de la Bienal de Venecia (2011). Ha escrito libros como Elogio de la pereza. Notas para una estética del cansancio (Madrid, 1992), El texto íntimo. Kafka, Rilke, Pessoa (Madrid, 1993), Nostalgias del trapero y otros textos contra la cultura del espectáculo (Cáceres, 2002), Escaramuzas. El arte en el tiempo de la demolición (Murcia, 2003), Fasten Seat Belt. Cuaderno de campo de un crítico de arte (Murcia, 2004), Fight Club. Consideraciones sobre el arte contemporáneo (Pontevedra, 2004), Sainetes. Y otros desafueros del arte contemporáneo (Murcia, 2007), Una “verdad” pública. Consideraciones sobre el arte contemporáneo (Madrid, 2010), Contra el bienalismo. Crónicas fragmentarias del extraño mapa artístico actual (Madrid, 2012), Mierda y catástrofe. Síndromes culturales del arte contemporáneo (Madrid, 2014), Arte y política en el tiempo de la estafa global (Valencia, 2014), En el instante del peligro. Postales y souvenirs del viaje hiper-estético contemporáneo (Murcia, 2016) o Estética a golpe de like (Murcia, 2016). Ha escrito monografías sobre Picasso, Miró o Eugenio Fernández Granell.
Calendario:Jueves 21, miércoles 27 de septiembre, jueves 5, miércoles 11, jueves 19, jueves 26 de octubre, jueves 2 y miércoles 8 de noviembre
Horario: de 17h a 19h
Precio: 170 euros
Inscripciones: En la web y en La Central de Callao
Información y reservas: cursosytalleres@lacentral.com
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